Lisboa: crucero turístico por el Tajo en barco tradicionalLisboa: crucero turístico por el Tajo

En este crucero guiado tendrás la oportunidad de ver el maravilloso paisaje del centro histórico de la ciudad mientras pasas por algunos de los lugares más destacados de la ciudad en un barco tradicional del año 1947.
Sube a tu barco, pintado a mano con flores para darle un toque de encanto y autenticidad. Solo quedan 7 barcos de este tamaño, todos ellos inscritos en el Museo Naval, lo que hace a este tour tan singular. Descubre la zona del paseo marítimo entre Praça do Comércio y Cais do Sodré, y Ribeira das Naus, donde se construyeron muchos de los barcos de los exploradores portugueses. Sigue hasta la Praça do Comércio, la plaza más grande de Lisboa y también uno de los símbolos más icónicos de la ciudad, reconstruida tras el gran terremoto de 1755.

Admira los impresionantes monumentos y edificios de al ciudad. Admira el Castelo de São Jorge, un castillo morisco con vistas al centro histórico. Para en la catedral de Lisboa, el edificio religioso más antiguo de la ciudad, construido en el año 114. Observa la iglesia de Santa Engrácia, un monumento del siglo XVII convertido en el Panteón Nacional. Sigue para ver el Cristo Rey y descubre su interesante contexto.

Después, observa Belém, donde se encuentran dos singulares monumentos: el Mosteiro dos Jerónimos y la Torre de Belém, ambos Patrimonios de la Humanidad. Los dos son de estilo gótico manuelino y sin duda te impresionarán. Maravíllate ante Padrão dos Descobrimentos, un monumento del que los barcos partían para comercial con Oriente. Por último, regresa a la estación fluvial de Cais do Sodré 1 hora y 45 minutos después.

Para garantizar la disponibilidad de la reserva lo antes posible. Vale la pena reservar con antelación, especialmente si planeas el viaje durante la temporada alta, como los días festivos o los fines de semana.

Esta excursión se puede cancelar sin costo alguno hasta :tiempo de cancelación horas antes del inicio del viaje. Si lo cancela después de 48 horas o no se presenta en la excursión, se le cobrará el precio total de la actividad. El retraso en la recogida o en la salida se considerará como no presentarse.